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Victor Gomezpotencia: Muy buena atención

Liliana Salces: Muy bueno. Demasiado caro

Luis Paterno: Hermoso lugar

ALEJANDRO BORDET: Ubicado en la icónica estructura del Club de Pescadores, junto al Aeroparque Jorge Newbery, este restaurante ofrece una experiencia culinaria única sobre las aguas del Río de la Plata. Con una arquitectura encantadora que parece flotar sobre el río, el restaurante Muelle es el lugar ideal para disfrutar de una comida en un ambiente sereno y acogedor.Las grandes ventanas panorámicas permiten vistas inigualables del río, especialmente al atardecer, creando un espectáculo natural que complementa la calidez del interior. El ambiente es tranquilo, con una decoración que mezcla lo rústico con lo elegante, haciendo de este un espacio perfecto tanto para encuentros románticos como para reuniones familiares.El menú destaca por su variedad de platos tradicionales argentinos, especialmente pescados y mariscos frescos, acompañados de una selecta carta de vinos. La atención es amable y profesional, asegurando que cada visita sea memorable.En resumen, el Restaurante Muelle del Club de Pescadores es un rincón escondido de la ciudad, donde el paisaje y la buena comida se combinan para ofrecer una experiencia inolvidable.

Belén Reussi: Lindo espacio para disfrutar del aire libre,la pesca deportiva para grandes y chicos y los eventos culturales, dónde se presentan pintores,grupos de danza y artistas musicales de todos los géneros 😉

mauricio oscar marcelo verde: Muy linda institución, excelente instalaciones y restaurante.

Sabrina Cacchione: Hermoso lugar para ir a comer y ver el rio de noche.

Philipe Dian: Maravillosa vista, buena comida y vino. Cuesta un poco alto.

JADE MATSUMOTO: En un rincón encantado de Buenos Aires, situado en Costanera Norte, Av. Rafael Obligado s, y Av. Sarmiento Cdad. Autónoma de Buenos Aires, Argentina se extiende como un susurro hasta besar el Río de la Plata, se yergue el histórico Muelle de los Pescadores, conocido antaño como el "Muelle de los Franceses". Aquí, donde una vez el eco de los trenes de la Estación Retiro se mezclaba con el oleaje, se fundó el 3 de agosto de 1903 el Club de Pescadores, la primera joya de su tipo en toda América Latina.En el siglo pasado, este muelle, que se extendía por diez cuadras, era el teatro de las faenas de empresas carboneras francesas que desembarcaban su carbón en nuestro suelo. Con el tiempo, sin embargo, el bullicio cesó y el muelle, olvidado, comenzó a desmoronarse bajo el peso del abandono. No obstante, un grupo de apasionados pescadores decidió devolverle su antigua gloria, reparándolo con sus propias manos para que sus aguas volvieran a ser testigos de la pesca.Así nació una comunidad unida por el amor a la pesca deportiva, una chispa de vida que iluminó el muelle con esperanza renovada. Pero la naturaleza, siempre caprichosa, asestó un golpe cruel el 10 de agosto de 1905, cuando una sudestada arrasó el muelle, llevándose consigo la humilde casilla que los pescadores habían construido. No se rindieron. A través de esfuerzos incansables y múltiples gestiones, el presidente Marcelo Torcuato de Alvear firmó un decreto que les permitía erigir un nuevo muelle y un edificio social en la Avenida Costanera Norte. El ingeniero Julio Quartino, con la misión de crear una joya arquitectónica, tomó los planos y dio vida a lo que sería conocido como el "castillo belga".Desde su inauguración, este majestuoso edificio ha sido testigo de innumerables historias. En 1939, la torre del Club albergó una antena de la agencia Reuters, que convirtió este rincón en la primera ventana del país hacia las noticias internacionales. Aquí, en estemítico enclave, fue donde Argentina supo por primera vez del fin de la Segunda Guerra Mundial.Hoy, el Club de Pescadores no solo es un santuario para los amantes de la pesca, sino también un lugar donde la tradición se mezcla con la modernidad. En su corazón, "El Muelle" ofrece una experiencia culinaria única. Con el telón de fondo inigualable del Río de la Plata, este restaurante mediterráneo deleita a sus comensales con manjares del mar, mariscos frescos y la pesca del día. Su especialidad, el pulpo español, es la estrella de un menú que fusiona lo tradicional con toques gourmet, cortesía de su chef ejecutivo.Además, la magia del Club se extiende más allá de sus encantadoras cenas. En su primer piso y la terraza, se alza la prestigiosa discoteca "El Muelle Costanera". Este nuevo espacio en Buenos Aires ofrece una de las vistas más espectaculares del río. Los sábados, la discoteca vibra con los sonidos electrónicos de renombrados DJs nacionales e internacionales, ofreciendo un exquisito ciclo de música pensado para los más exigentes amantes de la electrónica.Así, el histórico Muelle de los Pescadores en la calle Ayacucho sigue siendo un lugar donde el pasado y el presente se entrelazan en un baile eterno, celebrando la herencia de aquellos que, con esfuerzo y pasión, transformaron un viejo muelle en un símbolo de comunidad y resiliencia. Este lugar, donde la brisa del río acaricia las memorias y los sueños, sigue siendo un refugio para el espíritu romántico de Buenos Aires.Recomiendo visitar éste maravilloso lugar de ensueños.